LA SOCIEDAD ORWELLIANA

1984-2

“En una época de engaño universal, decir la verdad es un acto revolucionario.”

George Orwell, 1903-1950. Escritor británico.


Millones de personas viven conectadas a las redes sociales. Esta es, probablemente, la segunda revolución más importante que nos ha traído internet. La primera ha sido obviamente lo que conlleva la red de redes: la comunicación interplanetaria en tiempo real, el networking tanto social como laboral, lo que sin duda ha sido una gran herramienta para trabajar y comunicarnos, ahorrar tiempo, recursos y ejecutar procesos de comunicación con mayor precisión.

Los chats, los mails, los espacios virtuales se han convertido en un mundo paralelo en el que todos vivimos y convivimos como si fuese una segunda vida pegada a la sombra del mundo real. Y  Facebook, Tuenti, MySpace o Twitter y el resto de las redes sociales están cambiando a marchas forzadas no sólo el modo que tenemos de comunicarnos, sino también de convivir, hasta el punto de que si no estás ahí, no estás. No existes. Es el ostracismo del siglo XXI.

¿Es facebook el segundo estadío de la sociedad que describió George Orwell en su libro 1984? El primero sin lugar a dudas sería la plantación irracional de reallity shows que han asolado las pantallas de la televisión de todo el mundo,  en los cuales gente de toda condición pero con un mismo denominador común (exihicionismo y falta total de verguenza propia y ajena) exhibían su vida privada sin el menor reparo y con mucho mayor descaro.

De ahí ha surgido el término extemidad, que viene a ser algo así como exhibir la vida privada en público, a ojos de todo el mundo. El término lo acuñó el psico analista francés Jacques Lacan, por tanto no es nuevo, pero ha adquirido nuevos matices al entrar en contacto con las nuevas tecnologías. Ahora con un golpe de tecla cualquiera puede tener acceso a la información que los usuarios cuelgan en su perfil.

Pero a mí lo que me interesa es la otra cara de Facebook. La parte de la información, de los datos, de la protección de los mismos, del poder que delegamos los usuarios en los que están detrás controlando la información. Porque mi pregunta es esta ¿las redes sociales nos permiten comunicarnos mejor o sencillamente es una forma de gritar nuestra vida a quien quiera escuchar?

Primero de todo, Facebook, como todas las redes sociales, es interesante a nivel conceptual, pero el hecho de que no sirva para comunicarnos mejor es lo que me parece contradictorio. ¿Por qué una red de redes que no conecta vectores, sino otras redes resulta que torpedea más la comunicación de lo que la fomenta? ¿Cuál es el verdadero objetivo de las dos partes? Una parte son los usuarios y creo que facebook es un gran hermano gigante. La gente no sé si quiere alimentar su ego, pero claramente quiere que todo el mundo le vea, quiere existir y preexistir por encima de su vida real. Al fin y al cabo eso de que la información es real está por ver. No es real, es suprareal, es decir, son datos que pertenecen a la privacidad y que ahora se muestran en un espacio web donde no sólo cualqueira lo puede ver, eso seria lo de menos, porque al final son contenidos cuya atención es de tres segundos como mucho. SI yo tengo agregados a cien personas, y cada uno cuelga dos fotos y dos comentarios, son cien fotos las que tengo que ver. Y añadir doscientos comentarios, para ser equitativos. ¿Realmente la gente presta tanta atención a esa información? Yo creo que no.

El problema que yo veo es que esos contenidos sí tienen importancia para otros segmentos que ven las redes sociales desde la barrera: publicistas, por ejemplo. Cazadores de tendencias. Empresarios. Por ejemplo. Y ahí se está creando ahora un networking muy peligroso: mi jefe puede ver mi perfil, mi jefe puede entrar en mi vida ¿privada? y sacar conclusiones, datos, información. La  faceta de las redes sociales  que a mí me interesa que no es la conexión de la gente, sino la rentabilidad de los datos para gente que no se involucra pero que sí se lucra. Ese es mi punto, ya que aunque es una red que aunque tenga filtros es lo suficientemente abierta para que estos perfiles profesionales consigan valiosa información.

Está más que comprobado sociológicamente que el hecho de tener más conexiones no implica necesariamente tener una comunicación cualitativamente mejor. Y cuantitativa habría que verlo.
Y aquí me gustaría hablar también de perfiles. Un muy buen amigo mío me contó que no mucho conoció un caso (cercano) de una señora cuya hija pequeña (16 añitos) se abrió una cuenta en myspace y la chiquilla con el rollo de la pubertad la dio por hacerse fotos justa de ropa y en plan porno-adolescente, rollo Cheerleader, vamos. El asunto es que el  advertió a quien se lo comentó de se lo comentase a su madre y que evitase que siguiese publicando fotos por lo que pudiera pasar. La madre habló con la niña, y la niña obedientemente retiró las fotos para que su madre dejase de darle la chapa, pero cuando quiso y pensando su madre que el asunto estaba zanjado, volvió a publicar mas fotos.
Al poco tiempo «alguien» de una agencia de modelos se puso en contacto con ella y con la amiga que salía en las fotos, y las comió el tarro para una entrevista en persona, y obviamente las niñas aceptaron, pero claro, que no se enteren ni papá ni mamá.

La niña llegó llorando a casa porque las habían intentado secuestrar y habían tenido que salir corriendo y esconderse. Se denunció el hecho a la Policía, y sus padres se pusieron en contacto con myspace.com para que borrase las fotos (obviamente, la niña no volvió a tocar un ordenador, y menos con Internet) y myspace contestó con un «nanai, las fotos son nuestras, que las retire su hija si quiere, pero nosotros no vamos a borrar nada y tampoco la decimos que no las vayamos a utilizar en nuestra página sin su consentimiento, aunque su hija las haya retirado».Puede que sea un caso extremo, pero es lo que sucede con las propiedades y derechos en las redes sociales.
Y yo también tengo un caso de lo más funky.  Tengo una especie de amigo médico con el que trabajé, y con que tuve una relación a nivel de comunicación bastante intensa. Y de repente bajó la intensidad de su comunicación (bien es verdad que me sentía alguna vez algo acosada, porque requería gran parte de mi atención y eso es un poco axfisiante para mí) pero finalmente era bastante interesante y me enseñó algunas cosas.

Bien, cuando su intensidad de comunicación bajó, yo busqué la razón.Busqué y busqué y encontré la respuesta. ¿Dónde? En MySpace. Y las fechas coincidían: se creó una especie de blog y todo lo que me contaba a mí, ahora lo cuenta a un montón de desconocidos con la misma intensidad. No pude dejar de sentir cierto asco, puesto que cuando tú tienes una comunciación de un cierto nivel intelectual lo tienes porque tienes una respuesta proporcional y sobre todo estimulante. Y ahora veo lo mismo, las mismas expresiones, las mismas inquietudes, las mismas cuestiones lanzadas al ciberspace. Y sentí una mezcla de desprecio y no te voy a engañar: de superioridad. Pensé, joder tio, te he pillado sólo pulsando una tecla.
Y este tío no es un teen menor de edad, que se viste de cheerleader: es un profesional, culto, interesante y de 39 años. ¿Tenemos las mismas inseguridades y carencias que los adolescentes? ¿Los perfiles han pulido los límites y da igual la edad, el género, la nacionalidad, la clase social, la profesión o los intereses personales que tengamos?

Yo a veces me he preguntado porqué hace la gente estas cosas, que necesidades no cubiertas a nivel afectivo y comunicativo tenemos, porqué no resolvemos o indagamos en las fisuras que todos creamos y nos crean a la hora de establecer una comunicación real, tanto analógica como digital, y nos damos la vuelta y buscamos una salida fácil empezando de cero con gente que no nos conoce y no conocemos.
En cuanto al enfoque orwelliano, definitivamente me gusta porque veo esa sombra deslizándose a través de la poca inteligencia y audacia de cierta gente. Los datos privados de todos nosotros son lo único que tenemos, es lo que conforma nuestra vida, la verdadera red de nuestra personalidad. Eso lo colgamos GRATIS en una página web y el cebo es que un conocido que conoce tu mail te invite.
El punto es: ¿no es demasiado poder para los que controlan las redes sociales?

La ventaja que tienen las redes sociales frente a otros medios de comunicación es la publicación de contenido permanente, no es información volátil, como ocurre con los medios como los chats, el mail,etc y que desarrolla un poco nuestro lado excéntrico (publicamos para que los demás vean que lo hemos publicado). Lo que trata la gente no es de comunicarse con otros por la necesidad de comunicación, porque fuera de los contactos con personas que está geográficamente alejados deja las notas en su muro para que lo vean los colegas de siempre, a los que muy probablemente vea el fin de semana, y ofrecen la posibilidad de que lo vean otros y pinchen en «me gusta», es lo que nos hace populares, al fin y al cabo se trata de dar de comer a nuestro ego.

Facebook aglutina mucha información que hay desperdigada por la red, no hay inventado nada nuevo en eso. Es fácil percatarse de que tras esta recopilación de información hay objetivos comerciales; si yo fuese propietario de facebook vendería los perfiles (que no los datos) de mis usuarios a las empresas de publicidad u otras que estuviesen interesadas en saber cual es el perfil medio de usuarios entre x población, o entre x edades y que es lo que esos perfiles demandan.

Otra ventaja sobre otras redes es que los perfiles en un alto porcentaje contienen datos reales, no seudónimos o falsas personalidades, con lo que se evitan fraudes y sorpresas desagradables, pero está la otra cara de la moneda, ¿a quien le importa quien soy yo, donde nací, quienes son mis amigos, donde estuve de vacaciones… etc, etc?. Es algo que no alcanzo a entender, la gente publica detalles de su vida personal sin pudor alguno, y no existe privacidad ni propiedad intelectual ni nada de nada, lo que publicas es tuyo, pero también pasa a ser propiedad de Facebook, y si algún día sucede algo, a reclamar al maestro armero.

Las herramientas de comunicación están bien, pero cuando la comunicación es real.
Las redes sociales en Internet son sólo un síntoma de que en la gran mayoría estamos más solos que que la una, que sólo comunicarse no sirve, ha de tener ciertas características y que no toda la información es apta para todo el mundo, que nuestros intereses o aficiones o fotos o viajes o lo que sea que nos ocurra en el fondo sólo nos interesa a nosotros y a cuatro personas más, y que por muy ancha que sea la red de usuarios si todo lo que se dice y se cuenta es superficial lo único que conseguimos es que un reguero de simplezas colosales cruce el planeta.

Pero al final no puedo dejar de pensar que Orwell tuvo razón, mil veces razón: controlar a la gente pensando que son libres, dejando que piensen que hacen lo que quieren. No hay cadenas más irrompibles que aquellas que son invisibles, las que no podemos ver ni sentir que nos aprietan, pero de las que no nos podemos librar sencillamente porque no tenemos la suficiente lucidez para distinguir entre la libertad y la opresión. George Orwell dijo en una ocasión que ver lo que tenemos delante de nuestras narices requiere una lucha constante.  Y estamos en una época en la que ya no hay guerreros ideológicos, sólo masas pasivas que cuando tienen mucha sed, beben hasta veneno.

POLITICA DE PRIVACIDAD DE FACEBOOK

De acuerdo a las condiciones del contrato virtual que los usuarios libremente asumen, éstos le otorgan a Facebook la propiedad exclusiva y perpetua de toda la información e imágenes que publican, y autorizan el uso perpetuo y transferible junto con los derechos de distribución de todo lo que cuelgan en su página web. Cuando los usuarios cancelan la membresía, sus fotos e información personal permanecen, incluso cuando el usuario cancela su cuenta.

 

LA VERDADERA CARA DE FACEBOOK

Aunque inicialmente fue concebida por Mark Zuckerberg, la verdadera cara de facebook es el capitalista de riesgo, filósofo futurista y neocon Peter Thiel, cuyo enfoque de esta red social es un experimento de manipulación global. El tercer inversor de la compañía es James Breier: miembro de Incutel, ala principal de investigación de la CIA, promoviendo temas ideologicos a partir de facebook además de utilizarlo como base de pruebas y fuente de información sobre todos sus usuarios.

* Parte del contenido de este artículo forma parte de una conversación extremadamente interesante con mi amigo Viktor, así que él puede considerarse co-autor del mismo. Gracias mil, Vik.

 

 

 

35 comentarios en “LA SOCIEDAD ORWELLIANA

  1. me parece que la autora de este documento es una gran «reader between the lines»… ardo en deseos de conocer el contenido del proximo… me gustaria que escribiera sobre la pirateria y la propiedad intelectual… just my request

  2. YA HA EMPEZADO EL CONTROL DE LOS DATOS, OS DEJO UN ARTÍCULO PUBLICADO HOY, 26 DE FEBRERO DE 2010

    Facebook obtiene una patente sobre los ‘feeds’
    Polémica en Internet sobre qué puede pasar con este sistema de distribución de información si la empresa persigue su empleo
    Facebook ha logrado que se le reconozca una patente sobre los feeds (sistema automático de alimentación de nuevas informaciones empleado, por ejemplo, en los RSS). La noticia ha suscitado preocupación entre los internautas por el alcance de la misma y las consecuencias que podría tener si Facebook quiere ejercer el derecho que se supone le da la patente para controlar el uso de este recurso, muy empleado en Internet. En Twitter, un internauta se pregunta directamente si debe empezar a gritar para que se reforme la normativa de patentes, aunque en su blog, tras un primer análisis del registro de la patente, concluye que el campo de maniobra de Facebook es más limitado de lo que parece ya que no podría impedir, por ejemplo, el empleo de feeds en Twitter. En otros foros, la interrogación más insistente es qué pasará ahora. Otros plantean si de verdad Facebook fue el primero en emplear feeds y recuerdan su aparición en Twitter el mismo año en que lo hizo Facebook.

    Facebook introdujo los feed en su portal en 2006 y, curiosamente, se produjo un debate alarmista sobre su empleo que obligó al fundador del sitio, Mark Zuckerberg, a dar explicaciones en el blog oficial de la compañía. Zuckerberg figura como uno de los creadores de la patente en la documentación presentada para su validación. No es la primera vez que Estados Unidos acepta una patente de programas cuya amplitud puede acarrear serios problemas. En Inquisitr recuerdan la «estupidez» que supuso reconocer a Amazon una patente sobre el one click en la gestión de las compras en línea.

    En el texto de la aprobación de la patente se describe ésta como un método para desplegar feeds en una red social que incluye «la generación de nuevos ítems sobre las actividades asociadas con un usuario de las redes sociales» y adjuntar enlaces así como limitar su visibilidad a una lista predeterminada de visitantes.

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